¿Preguntas incómodas?, respuestas divertidas al estilo Tuenti

Nunca falta la tía indiscreta que quiere saber más de la cuenta y que lanza preguntas como si granadas fueran; porque una vez hechas, toda una guerra puede desatarse. Así que para apaciguar (o detonar) las cosas hemos recopilado algunas típicas preguntas incómodas para que sepas cómo responderlas:

Preguntas incómodas

¿Tan guap@ y sin novi@? ¿Para cuando el novi@?

El sarcasmo puede ser nuestro mejor aliado, así que úsalo a tu favor y responde de la mejor manera esas molestosas preguntas incómodas. “Nadie quiere alguien tan guapo en su vida”, “Soy demasiado para compartirme con otra persona”, ¨No necesito de un novi@ para ser feliz¨, ¨si te preocupa mi felicidad, solo depende de mí y no de una relación¨.

Preguntas incómodas

¿Para cuándo la boda?

¡Típico que ya pasaste los 25 y empiezan a quererte ver casad@ y casi que ya con hijos! Cuando te hagan esta preguntita, tú responderás algo como: ¨No necesitamos un papel que certifique nuestro amor¨, ¨todavía tengo mucho por hacer¨, “mi vida no depende de un casamiento” o un contundente ¨serás el primero en recibir la invitación¨. Con estas respuestas, el otro no querrá volver a meterse en lo que no le incumbe. Y al final puedes añadirle una risita, solo para echarle un poquito de gasolina al asunto.

Preguntas incómodas

¿Y los hijos para cuándo?

Ante una pregunta como esta, ¡Esta es la cara! Resulta que para ciertos, estar casado y sin hijos es sinónimo de que algo no está bien; y empieza la preguntadera, y ese es un asunto solo tuyo y de tu pareja (a menos que seas Kim Kardashian y su cuarto bebé). ¿Qué responder? ¨Lo tenemos planeado para unos 20 años¨ o ¨ya los tenemos, solo que no los sacamos a la calle¨, “la decisión es mía y de mi pareja” Sorry, not sorry

Preguntas incómodas

¿Sí estás ahorrando?

¨Sí estoy ahorrando para conocer el mundo y comer todo lo que se me antoje¨, esto responde a la pregunta, pero se va por la tangente. Pues la mayoría de personas mencionan el ahorro como el inicio de que ya te independices y compres tu casa por ejemplo. Otras respuestas: ¨Sí, estoy ahorrando lo suficiente para darle la vida que se merece a mi gato¨, ¨déjame chequeo mi alcancía y te aviso¨, ¨no puedo ahorrar, mis fines de semana me lo impiden¨.

¿Has subido de peso?

¨Solo estoy buscando diferentes formas para ver cuál me gusta más¨, es una respuesta sarcástica que cortará que quieran seguir curioseando sobre tu figura. Y es que siempre habrá quien pregunte sobre nuestro cuerpo. Ser cortante también es una manera de decirles que es nuestro cuerpo y que solo a nosotros debe importarnos.


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Nuestra vida privada puede ser un tema de conversación entre familia y conocidos. Así que córtales nota con estas sarcásticas y muy sinceras respuestas que dejarán fríos a más de uno. O regálales un Combo Tuenti para que curioseen todo lo que quieran en internet.

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